Ambientación

Ambientación
Nadie sabe lo que le depara al llegar a Kepler. Los ex gobernantes terrícolas han firmado un pacto en el que aceptan este régimen monárquico y juran acatar las leyes keplerianas.
Los terrícolas lo han perdido todo, no tienen dinero ni poder. Solo unas humildes casas que los reyes de Kepler le han cedido hasta que puedan conseguirse una propia.
Entre los keplerianos la cosa es bastante complicada. Muchos tienen miedo a los terrícolas y no los querían en su mundo, argumentando que si no han cuidado su propio mundo ¿por qué lo harían con uno al que recién llegan?. Para otros no pasa por temor, sino por desconfianza, creen que en verdad algo ocultan. Otros los miran con curiosidad y quieren acercarse a ellos para estudiarlos como si se tratara de ratas de laboratorio. Y los menos están contentos con su llegada.
Cuando se decidió la aceptación de su llegada, el consejo real en su totalidad se opuso, es por esto que una vez los terrícolas en Kepler y viendo el repudio que algunos sentían para con su forma de gobierno y vida, el consejo aprovecho a este grupo (los rebeldes) para culparlos de la dudosa muerte de los reyes. Aunque en verdad esta muerte estuvo a manos del propio consejo, creyendo que, a los tres hijos (de corta edad) de los recientemente fallecidos reyes podrían dominarlos y hacerse con el poder y de paso sembrar el miedo y rechazo hacia los terrícolas.